2º) ME VEO AUTOSUFICIENTE.
Frases tales como: “No necesito a nadie para lograr mis objetivos” “Hago lo que quiero, cuando quiero y como quiero” Muchos creen que pueden conseguirlo todo con dinero. Muchos creen que pueden pisotear y engañar para conseguir el fin deseado “el fin justifica los medios”. ¡qué peligroso! Cuánto más arriba estés, la caída será más grande! Estaríamos hablando de contravalores tales como: Avaricia, codicia, deshonestidad, obstinación, altivez, orgullo, vanidad…(cuanto más tienes, más quieres)
Tan peligroso es tener la autoestima por los suelos como sentirse autosuficiente y no necesitar a Dios. ¿Dónde está el equilibrio? Como siempre, lo encontramos en la Palabra de Dios: “Digo pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura.” (Rom. 12:3)
Los valores a enfatizar son: Discrección (trabajar a la sombra y no desear figurar, sobresalir); generosidad, honradez, modestia, sensibilidad y humildad.
Cuando Jesús dijo: “Aprended de mí” ¿qué piensas que quería que aprendíesemos de él? Su buena oratoria, su sabiduría, su poder para sanar…?
¡¡no!! Aprended de mí ….que soy MANSO Y HUMILDE DE CORAZÓN (Mt.11:29); Mirando la vida de Jesús vemos lo que significa ser manso y humilde de corazón (y no es precisamente tener la autoestima baja)
3º) ME VEO REDIMIDO Y PARTE DE LA FAMILIA DE DIOS.
Aquellos que hemos depositado nuestra confianza en el Dios vivo y verdadero podemos hacer nuestras las palabras del apóstol Pablo. “Pero por la gracia de Dios soy lo que soy” (1º Cor. 15:10) Esta verdad nos debiera bastar para estar contentos con lo que somos y con lo que tenemos.
El apostol Pablo es un buen ejemplo de alguien que antes de conocer a Dios se sentía prepotente y autosuficiente pero que ahora que ha tenido un encuentro con Jesús, su fuerza y su gloria está en el Señor.
El sentirse perdonado, restaurado y salvado hace que vivamos una vida plena. No importa las circunstancias por las cuales estemos atravesando porque estamos al lado de Alguien que está a nuestro lado y que controla todo.
Dios nos hace dignos, nos liberta, nos da paz, nos da amor, gozo (Gálatas 5:22-23) ¿Dónde fuera de Dios podemos encontrar todo esto?
Los valores personales en una persona que se siente perdonada, restaurada y salvada son:
alegría, ánimo, aliento, contentamiento, lenguaje sano, madurez, mayordomía, perseverancia, seguridad, valentía y valor a la vida. Valores que tenemos que ir desarrollando poco a poco, cultivando paso a paso, porque recordar que “el camino hacia la madurez no tiene atajos”
Hablo con el árbol
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La primera vez que leí «El hombre en busca de sentido» de Viktor Frankl fue
hace más de 30 años como parte del programa de mi clase de Literatura.
Además d...
Hace 1 hora
4 comentarios:
Hace dias que no pasaba por aqui, pero cuánto me alegro de haber pasado hoy,y leer estas meditaciones sobre los valores cristianos en el hogar y en uno mismo...
Gracias Esther y Eva!!
Pues gracias Ana por haberte parado un ratito a la sombra de las palmeras de este oasis
Gracias Evita por pasarnos ésto. Y también se agradece a tu hermana por permitirte hacernos llegar sus apuntes a todos los bloggeros.
Besitos a las dos.
Hola Isa, pues ya casi se está terminando la serie, intentaré convencerla para futuras aportaciones...
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