La Biblia...

La Biblia: la leo, medito, estudio, memorizo, aprendo y OBEDEZCO... es entonces cuando me doy cuenta de que está VIVA...

Y este fue mi viaje a través de la Biblia esta semana:
Lunes 14: “Pero ten cuidado de no olvidar al Señor tu Dios” (Deut. 8:11) Olvidar... ¡cuántas cosas he olvidado a lo largo de mi vida... y las que me quedan...! pero que sabias estas palabras de Moisés... que nunca olvidemos al Señor nuestro Dios... que no lo olvidemos en medio de nuestras tareas ordinarias (cocinar, planchar, limpiar...) que no lo olvidemos en nuestras conversaciones, que no lo olvidemos en nuestros pensamientos, que tengamos cuidado... ¡y no lo olvidemos!
Martes 15: “Escucha, Señor, mi oración; llegue a ti mi clamor” (Sal 102:1). Oro al Señor cada día pero ¿clamo? Y la verdad es que si me fijo a mi alrededor (enfermedades, crisis, Japón, Libia...) o miro en mi interior (¿?) me doy cuenta que mi oración debería ser un “clamor”...
Miércoles 16: “Tan lejos de nosotros echó nuestras transgresiones como lejos del oriente está el occidente” (Sal 103:12) ¡Qué consuelo el recordar esta promesa! Dios nos perdona y “echa” nuestros pecados en el lugar más lejano... y si Dios los ha quitado de en medio... ¡que nunca los traigamos a nuestra memoria!
Jueves 17: “Dichosos los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios” (Mat 5:9) Me gusta esta traducción: “los que trabajan por la paz”, porque no solo es que sean personas pacíficas “pasivas” sino que se comprometen por trabajar por la paz... ¡uf! ¡qué comprometido es leer la Biblia!
Viernes 18: “El ángel del Señor regresó y, tocándolo, le dijo: “Levántate y come, porque te espera un largo viaje”” (1º Rey. 19:7) Estas palabras se las dijeron al profeta Elías... después de una gran victoria en el monte Carmelo llegó una gran depresión... y el Señor después de dejarle dormir (y de dejarle quejarse... leer el texto completo) le da la provisión necesaria para que se ponga “en marcha”. ¿Estás “cansada”? (yo sí ...) pues “levantémonos y comamos” porque el “viaje será largo”.
Sábado 19: “De oídas había oído hablar de ti, pero ahora te veo con mis propios ojos. Por tanto, me retracto de lo que he dicho, y me arrepiento en polvo y ceniza” (Job 42:5-6) La historia de Job es increíble y estas palabras las pronuncia al final del libro cuando se “enfrenta” a las propias palabras de Dios. Recordé una antigua canción que decía: “cuando miro y veo tu grandeza... te adoro a ti...”
Domingo 20: “Pero mi siervo Caleb, por cuanto hubo en él otro espíritu, y decidió ir en pos de mí, yo le meteré en la tierra donde entró, y su descendencia la tendrá en posesión” (Núm 14:24) Este ha sido el versículo clave de la predicación de hoy, ha sido un mensaje sencillo pero muy alentador... se ha hablado de servicio, fidelidad, recompensa...

¿Te habló el Señor esta semana a través de su Palabra?