"Joven, llena tu jarra que ya te la beberán".
No recuerdo quien la escribió (¿quizá un poeta español?). Yo la oí en unas clases bíblicas, la persona que hablaba nos retaba a aprovechar nuestra vida, llenarla de la Palabra de Dios y estar preparados para compartirla en el momento oportuno.
La frase puede tener más aplicaciones, claro. Pienso en tantas personas llenando su vida de "basura", en forma de "programas basura", "video juegos basura"...
Así que mi reto, para mí la primera, es llenar mi vida de "algo" que luego pueda compartir con otros. ¿De qué...? Para empezar creo que Filipenses 4: 8 nos puede ayudar:
"Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero,
todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre;
si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad. "
8 comentarios:
Yo creo que has llenado y sigues llenando tu jarra con la Palabra, pues se nota en tus escritos y en tu programa radial. ¡Te admiro! Pero sobre todo, te considero mi amiga.
Keila, a veces entran cosas que no deberían..., menos mal que Él nos conoce, perdona y ayuda. Gracias por tus palabras, ¡qué privilegio el haberte conocido!
Yo escuché la frase, pero con una esponja. "Émpapate bien, que ya te estrujarán y te sacarán lo que tienes".
Bueno, Víctor, me gusta más la de la jarra..., eso de que te "estrujen" no suena muy poético...
Si no llenamos continuamente la jarra con la verdad, no tendremos nada que dar a los que nos rodean, principalmente a nuestras familias.
Tu eres una jarra llena!!
Me vino a la memoria esa canción que dice...
Lléname, lléname Señor,
dame más, más de tu amor,
yo tengo sed sólo de Ti,
lléname Señor.
¿la recuerdas?
Él saciará nuestra sed, para que podamos saciar también la de otros.
Un abrazo, Eva.
Es verdad, Tinker, la familia es el primer sitio donde "nos beberán", y mejor que tengamos nuestra jarra llena de paciencia, amor y sabiduría.
Sí Patricia, la canción comienza "como el ciervo busca por las aguas así clama mi alma por ti, Señor". Aún la cantamos algún domingo que otro. Y me hiciste recordar otra que decía "haz de mí un vaso nuevo, Señor, donde otros puedan beber, beber de tu agua viva, agua que quita la sed" (no sé si la conocerás).
Besos para ti hasta Argentina.
Publicar un comentario