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Aunque ayer, gracias a que fue día festivo, pudimos celebrar el cumpleaños de mi madre (y de paso otros 7 cumpleaños más que hay este mes en mi familia...) no quiero pasar la oportunidad de felicitarla desde este espacio. No siempre se cumplen ¿? años ... pero lo más importante es que es el primer cumpleaños después de ser operada de cáncer. Ahora está en medio de todo el proceso (difícil y duro) de quimioterapia. Pero con esta enfermedad nos ha vuelto a enseñar a sus hijos y a todo el que la conoce su confianza en Dios y cómo en medio de las pruebas de la vida se puede gozar de la paz que solo Dios puede dar. Por todo eso
¡felicidades mamá! espero que el Señor te conceda que podamos celebrar muchos más juntas y mientras tanto quiero seguir aprendiendo de ti y admirarte por tu fe y valor.
¡Te quiero!
Y dedicada para ella vuelvo a escribir una poesía que apareció en el programa de radio HdH y que saqué del libro “Sabiduría para la vida familiar” del escritor Chuck Swindoll.
“Querida mamá:Mientras camino por el museo de mis recuerdos,
Te debo... tu TIEMPO. Día y noche.
Te debo... tu EJEMPLO. Consistente y confiable.
Te debo... tu APOYO. Estimulante y desafiante.
Te debo... tu HUMOR. Chispeante y veloz.
Te debo... tu CONSEJO. Sabio y callado.
Te debo... tu HUMILDAD. Genuina y generosa.
Te debo... tu HOSPITALIDAD. Sonriente y cálida.
Te debo... tu FLEXIBILIDAD. Paciente y alegre.
Te debo... tus SACRIFICIOS. Numerosos y rápidamente olvidados.
Te debo... tu FE. Sólida y segura.
Te debo... tu ESPERANZA. Incesante e indestructible.
Te debo... tu AMOR. Dedicado y profundo.”