Nacen, crecen, se reproducen...

Este año estoy estudiando en dos cursos a la vez: 3º de infantil y 3º de Primaria... Bien, me explicaré: es mi hija Nora la que está en infantil pero como cada día hacemos alguna tarea (bien del cole o bien extra) pues ahí estoy yo recordando que la “m” con la “a “ es “ma”..., y contando que 3 + 5 son 8... esta es la parte fácil porque la difícil es estar con Josué explicándole o simplemente animándole a que termine todas sus tareas que este año parecen interminables y más de un día termino con mi paciencia puesta a prueba (menos mal que Víctor también está “al pié del cañón” y así nos vamos turnando). Pero lo que quería contaros es que ayer estuvimos estudiando en “Cono” (Conocimiento del Medio) sobre los seres vivos y una frase decía: “Los seres vivos nacen, crecen y se reproducen”, en seguida recordé mis días de escolar y en nuestra época la frase se completaba con “y mueren” pero por lo visto ahora la cosa ha cambiado... pero no quiero hablaros sobre la muerte ahora sino que justo estoy pensando en esto y recibo la información de que el próximo campamento de G.B.U. en Andalucía tiene el siguiente lema: “Nacen, crecen y se reproducen” y lo aplican a “qué es ser discípulo de Jesús”. Así que pensé... ¡qué bueno! igual que un “ser vivo”, por definición, nace, crece y se reproduce, como cristianos (discípulos de Jesús) tenemos que nacer a una “nueva vida” (en la Biblia se llama “nuevo nacimiento”, leer Juan 3 para más info ), después tenemos que ir creciendo (conocer más a Dios y su voluntad para nosotros a través de la Biblia) y luego compartir con otros las buenas noticias de salvación... por lo menos para ser un “discípulo vivo”. Y para terminar este pensamiento os comparto una definición de “cristiano” de un libro que estoy leyendo (se titula “Cómo ser cristianos sin estar comprometidos”, sí habéis leído bien... y en breve os contaré más sobre él), pero aquí va la definición: “a la luz del relato de Lucas es cristiana aquella persona que ha oído el Evangelio claramente expuesto, que lo ha creído y se ha propuesto vivir de acuerdo con la voluntad de aquel al que se ha entregado como Señor, que se ha bautizado para testimoniar esa decisión y ser reconocida por propios y extraños como discípulo, y que muy pronto ha dado señales claras de haber asumido su compromiso y ha comenzado a compartir con los demás cuanto es y cuanto tiene...”

Y ahora me voy a seguir estudiando...