Un antiguo himno que solíamos cantar en la
iglesia cada fin de año comienza diciendo:
“Desde el lindero que
un año demarca,
¡Eben-ezer!
Canta en un salmo de
ardiente alabanza
Tu pueblo fiel.
Mira los días que
raudos volaron
Y en ellos ve
Huella indeleble de
tu amor y canta:
¡Eben-ezer!
CORO
¡Eben-ezer!
¡Eben-ezer!
¡Tú con nosotros! y
el salmo resuena
¡Eben-ezer!”
La palabra Ebenezer es una palabra de origen hebreo, la podemos encontrar en
la biblia, y significa “roca del
socorro” o “piedra de ayuda”.
Después de una victoria ante los enemigos el profeta Samuel la utilizó para remarcar
que el Señor los había ayudado.
“Luego Samuel tomó una piedra grande y la
colocó entre las ciudades de Mizpa y Jesana. La llamó Ebenezer (que significa «la
piedra de ayuda») porque dijo: «¡Hasta
aquí el Señor nos ha ayudado!»”. (1º Samuel 7:12)
Decimos adiós al año 2023 y miramos los días
que volaron y en ellos también vemos la huella indeleble del amor de nuestro
Dios y junto a Samuel exclamamos: “¡Hasta
aquí el Señor nos ha ayudado!”.
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