Los
apuntes de esta semana del estudio de Lucas son un poco diferentes ya que
algunos de los textos los desarrollaré en forma de preguntas. De todas formas
aquí los tenéis por si os son de ayuda en vuestra meditación personal. Para
confeccionarlos me he ayudado, aparte del propio texto bíblico, de algunos
comentarios bíblicos entre los que destaco: “Lucas, del texto bíblico a una
aplicación contemporánea” de Darrel L. Bock.
Dos
llamamientos y dos milagros (Lucas 5:1-32)
1.- Llamamiento de los primeros
discípulos. (5:1-11)
La
palabra discípulo significa “aprendiz”, en este contexto es el llamamiento a
aprender del “maestro” (Jesús) tanto de sus enseñanzas como de su estilo de
vida.
Preguntas:
-¿Qué
dos personajes principales aparecen en este texto?
-
¿Desde dónde termina enseñando Jesús?
-
¿Cuál era la profesión de Simón?
- ¿Qué
le pidió Jesús a Simón después de terminar de enseñar?
-
¿Qué le contestó Simón?
-
¿Por qué crees que Simón hizo caso a Jesús?
-
¿Cuál fue el resultado de obedecer a Jesús?
-
¿Qué lección aprendió Simón?
-
¿Qué lección le enseñó Jesús?
-
¿Qué significa ser “pescador de hombres”?
- ¿Quiénes
siguieron a Jesús?
Aplicación:
-
Jesús hoy sigue buscando “discípulos”
(Mat 28:19-20).
-
Si reconocemos que necesitamos ayuda y
sabemos que Jesús es el único que nos puede ayudar, estaremos en condiciones de
dejarlo todo y seguirle.
-
Para nosotros, seguir a Jesús es más
que reconocerlo como Salvador. Significa dejar nuestro pasado y dedicar nuestro
futuro a Él.
2.- Jesús sana a un leproso. (5:12-15)
El
leproso sabía que Jesús podía curarlo pero su petición plantea la cuestión de
si Jesús está o no dispuesto a sanarlo. Los leprosos estaban excluidos de las
ciudades y éste leproso se sentía indigno.
Jesús
“le toca”, ¿cuánto tiempo llevaría sin ser tocado por una persona? Jesús le
hace digno.
Juan 6:35 y 37 “Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el
que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás… Todo
lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al
que a mí viene, no le echo fuera”
Aplicación: La lepra se usa como un símbolo del pecado en la Biblia. Nuestro
pecado es tan “feo” como la lepra y aún más peligroso porque nos hace estar
separados de Dios. Jesús quiere limpiarnos de nuestro pecado.
Rom
3:23 “por
cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”
Rom 6:23 “Porque la paga del pecado es muerte,
mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor.”
Aplicación 2: Jesús buscaba momentos de tranquilidad para orar y tener un
tiempo especial con Dios Padre (v16). Nosotros también debemos buscar esos
momentos.
3.- Jesús sana a un paralítico. (5:
17-26)
Preguntas:
- ¿Quiénes
son los protagonistas de esta historia?
- ¿Qué
querían los amigos del paralítico?
-
¿Qué problema se encontraron?
-
¿Cómo solucionaron ese problema?
-
¿Qué alabó Jesús de estos amigos?
-
¿Qué fue lo que dijo al paralítico?
-
¿Qué dijeron los fariseos y maestros de la ley?
-
¿Cómo demostró Jesús que tenía poder para perdonar pecados?
Aplicación: El argumento de Jesús es que el milagro de sanidad del
paralítico demuestra su autoridad para perdonar pecados. Jesús es Dios y puede
perdonar nuestros pecados.
Aplicación 2: Jesús elogia la fe “activa” de los amigos. Es una fe que se
pone en movimiento.
4.- Llamamiento de Leví. (5:27-32)
Los
recaudadores de impuestos tenían muy mala reputación en Israel ya que cobraban
los impuestos para el imperio romano y era conocido que cobraban una sobretasa
para su beneficio personal.
-
La fiesta: Leví utiliza sus recursos
materiales para dar a conocer a sus amigos su nueva relación con Jesús.
-
La reacción de los religiosos, v.30.
-
La respuesta de Jesús:
Luc 5:31 y 32 “Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están
sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a
pecadores al arrepentimiento.”
Pone
de manifiesto el gran problema de las personas “religiosas” que ya se creen
buenas y por tanto no tienen necesidad acudir a Jesús.
La
imagen es clara: cuando vamos al médico sabemos varias cosas: estamos enfermos,
necesitamos ayuda y nosotros no podemos curarnos solos. El llamamiento de Jesús
se dirige a quienes se dan cuenta de que necesitan ayuda.
Sin
arrepentimiento no hay perdón. La palabra arrepentimiento significa cambio de dirección.
Jesús quiere dar nueva vida a los que se lo pidan.
2Co
5:17 “De modo
que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he
aquí todas son hechas nuevas.”
Aplicación: Hoy Jesús sigue llamando a pecadores al arrepentimiento.
Hoy Jesús sigue llamando a personas corrientes para ser sus discípulos.
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