Libro: “Diseño exclusivo”: Hecha por Dios; de Ruth Conard. (II parte)

Me ha dado pena que se terminara este libro... mientras lo leía me imaginaba a Ruth como una “mentora” hablando y animando a una “discípula” más joven. La segunda parte del libro comenta las biografías de 6 mujeres del Nuevo Testamento: una mujer lisiada, Ana la profetisa, Elisabet (madre de Juan el Bautista), María (la madre de Jesús), Dorcas y Priscila.

Si bien de todas ellas he aprendido, me han llamado especialmente la atención los capítulos dedicados a Elisabet y a Priscila. La primera porque como mujer mayor “recibió” a la joven María, la ayudó y la bendijo sin “celos, envidias o comparaciones” como hace notar la autora. De Priscila me ha llamado la atención que siempre la encontramos junto a su marido siendo de bendición a otros...

Y estas son algunas de mis frases subrayadas:

“Cuando confías en Cristo, tanto para tu presente como con respecto a tu futuro, él te defiende. No tendrás otro defensor como tu salvador. Dale hoy tus preocupaciones a él y pídele que sea tu defensor. A él le encanta defenderte.”
“Dios tiene un futuro y una esperanza para ti, sin importar cuál sea tu lugar, tanto en lo que se refiere a la edad que tienes como al sitio en donde te encuentras.”
“La Escritura denomina “dones” a estas habilidades que han sido dadas por Dios e impartidas por su Espíritu Santo. Es de tremenda importancia que desenvolvamos estos regalos, los exploremos, los practiquemos y los afinemos, y que los usemos para la gloria de Dios y la edificación de su cuerpo, que es la iglesia.”
“¿Anhelas que tu alma sea revivida? ¡Lee la Palabra de Dios! ¿Deseas ser sabia y tener discernimiento para todas las decisiones que debes tomar? ¡Lee la Palabra! ¿Te gustaría que tu corazón se llenara de gozo y que a tus ojos regresara esa luz de esperanza? ¡Lee la Palabra!”
“Querida hermana, lo que sea que Dios te haya dado, deja que él lo tome, lo mejore, te dé gozo y lo use para su gloria.”
“Esto es lo que Dios quiere hacer contigo, mi amiga. Que seas bendición en un grupo pequeño, para alguna persona en particular, o puede ser para un gran grupo donde Dios te utilizará poderosamente. El tamaño no es lo que importa, lo importante es que te des a ti misma y los dones que Dios te ha dado...”
“Deja que Jesús brille en ti. Camina en la libertad que él ha ganado para ti. ¡Levántate como una columna en Su reino!”

Sí, somos “Diseño exclusivo”, cada una diferente, especial... y con un propósito eterno para cumplir...