A Story: From the Ashes from NewSpring Media on Vimeo.
Como está en inglés he hecho una traducción “sobre la marcha”, no está todo pero creo que podréis entender más o menos de que va el contenido...
Ella: “Cuando te casas no piensas que en unos años todo va a acabar... pero eso fue lo que nos ocurrió...”
Él: “Crecí en la iglesia y de pequeño fui un “buen” niño pero cuando terminé el colegio me aparté de Dios y viví mi propia vida. Tenía mi grupo de amigos y a través de ellos conocí a Jennifer.
Ella: “Cuando conocí a Jasón los dos éramos muy egoístas, en nuestra relación había conflictos y amargura pero cuando nos dimos cuenta de que estaba embarazada decidimos casarnos de todas formas. Nos enfrentábamos constantemente, nos hacíamos daño a través de nuestras palabra hirientes... Llegamos a un punto en el que nos odiábamos y estaba convencida de que todos mis problemas se resolverían si dejaba a Jasón.”
Él: “Recuerdo que el día de mi divorcio pensé que debía estar contento porque era libre de nuevo, no tendría que responder ante nadie, pero en realidad me sentí fracasado... Mi padre estaba asistiendo a la iglesia de “New Spring” desde hacía un tiempo y me animó a ir, fui un domingo y empecé a asistir regularmente... y escuché que Dios podía hacer cosas maravillosas en los matrimonios... y sentí como el Espíritu Santo quería hacer eso por mi familia... en ese momento tomé la decisión de luchar por mi familia...”
Ella: “Me quedé sorprendida al oír eso pero noté que él había cambiado, y empezamos a hablar de nuevo. Me invitó a la iglesia y fui con él... y ese mismo domingo oré para recibir a Cristo en mi vida. Nos dimos cuenta que si queríamos que nuestra relación funcionara teníamos que centrarnos en Jesús. Nos unimos a un grupo de estudio bíblico en los hogares y recibimos la amorosa ayuda de otras parejas cristianas. También fuimos a la Conferencia de matrimonios donde nos ofrecieron útiles herramientas para que nuestro matrimonio tuviera como centro a Cristo.
Así que unos meses después de nuestro divorcio nos volvimos a casar en la iglesia, con nuestros familiares y amigos presentes. Es increíble ver cómo Dios trajo nuestro matrimonio “desde las cenizas” a “una rama nueva”. Hemos decidido poner nuestros ojos en él, ser obedientes, y hemos visto cambios que nunca hubiéramos imaginado. Dios puede hacer cualquier cosa... puede construir relaciones, y lo que es más asombroso para mí es que no hay ninguna situación sin esperanza, nada es demasiado grande para Dios”
Él: “Somos humanos y nuestro hogar sufre de vez en cuando por ello. Aún tenemos conflictos, la diferencia es que ahora el divorcio no es una opción, Jesús es la causa de ello. No importa lo que venga... Jesús está al control.