Continúo
leyendo el libro "Promesas poderosas para toda pareja" de Jim y
Elizabeth George y en el capítulo 2 hablan sobre la promesa de que Dios puede y
de hecho nos cambia cuando tenemos una relación personal con él.
El
texto clave es:
2Co 5:17 "De modo que si alguno está en Cristo, nueva
criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas."
La
condición para que ese cambio se opere es "estar en Cristo" que para
nada es haber nacido en un determinado país que se llama "cristiano",
o ir de vez en cuando a la iglesia... es haber sido "reconciliados"
con Dios, haber sido perdonados de nuestras "cargas" más o menos
grandes (en la Biblia se usa la palabra "pecado")... ¡menudo cambio
para bien Dios puede hacer en nuestras vidas!
Ya en
el Antiguo Testamento Dios había prometido un cambio en nuestro
"corazón":
Eze 36:26 "Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu
nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os
daré un corazón de carne."
Jesús
mismo utilizó la palabra "nuevo nacimiento" refiriéndose al requisito
para entrar en el reino de los cielos:
Juan 3:3 "Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de
cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios."
Algo
más que resalta el libro es que "los cambios interiores se muestran en el
exterior":
Mat 7:17-20 "Así, todo buen árbol da buenos frutos,
pero el árbol malo da frutos malos. No puede el buen árbol dar malos frutos, ni
el árbol malo dar frutos buenos. Todo
árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. Así que, por sus
frutos los conoceréis. "
Es
cierto que los cambios no siempre ocurren con rapidez pero debemos recordar
cada día que debe ser un proceso constante.
Y para
terminar dos preguntas para hacernos reflexionar:
"¿Cómo
ha cambiado mi vida desde que acepté a Cristo?"
"¿Qué
otros cambios quiere Dios que yo realice en mi vida que reflejarán
mucho mejor
que yo soy su hija(o)?"
(Continuará... con próximos capítulos)
Eva, precisamente hablé de estos versículos el sábado en el H.A.me ha dado alegría volverlos a leer hoy. Un abrazo!!! Noemi L.
ResponderEliminarMe alegro que estemos "conectadas" en lo que vamos meditando en la Biblia. Estoy segura que el sábado fue un día de mucha bendición, me hubiera gustado haber estado también... Un abrazo hermanita
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